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Uno de los mayores problemas que puedes sufrir en una vivienda es la humedad. Pero si sufres este problema debes saber que puedes realizar una reclamación por daños y perjuicios. Dicho así puede parecer algo muy complicado, pero a través de esta guía podrás comprobar que la reclamación te resultará mucho más fácil de lo que piensas.

Antes de entrar en detalles, queremos que sepas que no te debes conformar con las humedades en tu vivienda. Si te has dado cuenta de que tu compra va acompañada también de humedades, es importante que reclames. Sigue esta guía y así podrás defender tus derechos.

¿A quién se le pueden reclamar daños y perjuicios por humedades?

Si has realizado la compra de una vivienda y quieres que alguien se responsabilice de las humedades que estás sufriendo, es el momento de poner en práctica la siguiente guía.

Dependiendo del tipo de humedad que estés sufriendo deberás realizar un tipo de reclamación u otro. Te vamos a hablar de los principales tipos para que te sea más fácil saber qué vía usar.

  • Comunidad de vecinos: en buena parte de los casos los problemas de humedad pueden estar relacionados por un problema relacionado con la comunidad de vecinos. Si el mantenimiento de la comunidad no es el adecuado, ese mal mantenimiento puede provocar el problema de las humedades. En caso de que el problema esté vinculado a un mal estado del edificio o una mala decisión, entonces se puede realizar una reclamación a la comunidad de propietarios.
  • Seguro de comunidad de propietarios: siguiendo la estela anterior, en caso de que la comunidad de vecinos cuente con un seguro, entonces podrás poner la reclamación al seguro para que sea el mismo el que haga las reparaciones oportunas para dejar de sufrir las humedades. Dependiendo de las coberturas, puede cubrir únicamente los daños comunitarios y también los daños provocados por la comunidad a nivel individual. Es importante analizar el seguro para poder certificar si realmente tenemos derecho o no a la reparación. Si tienes derecho tendrás que reclamar al seguro usando las vías adecuadas.
  • Vecino: en muchas ocasiones es el vecino el que puede provocarnos las humedades. Normalmente el problema suele ser debido a negligencias, siendo la más común la fuga de agua. En este caso, lo que deberás hacer es recoger las pruebas y posteriormente presentar la queja. Como lo más seguro es que el vecino tenga seguro, él mismo se hará cargo de los daños que haya provocado esa negligencia.
  • Seguro: también puedes poner una reclamación a tu propio seguro, siempre y cuando el mismo vaya acompañado de la cláusula adecuada. Para ver si te cubre o no los daños por humedad propios, solo deberás llamarlo y te dirá si tienes o no cubierto ese daño. En caso afirmativo, entonces deberás seguir el procedimiento para poner una reclamación. Dependiendo de la cobertura, el seguro puede cubrir únicamente la reparación o incluir también una compensación económica.
  • Constructora: dentro de este grupo podemos incluir al agente de construcción, promotor inmobiliario… En este caso la reclamación la podrás presentar siempre y cuando la humedad sea provocada por un defecto en la construcción o diseño de la vivienda. Por ahora, se ha destacado que el periodo para presentar reclamaciones no debería comenzar a correr hasta que los consumidores estén plenamente conscientes de la naturaleza abusiva de la cláusula. Esto abarcaría situaciones como defectos en la impermeabilización, la estructura o la calidad de los materiales empleados en la edificación. En tales casos, resulta crucial disponer de pruebas periciales y legales contundentes para respaldar la reclamación.

Como has podido comprobar, hay muchas opciones. Lo importante es saber quién ha provocado el daño para poder poner la reclamación oportuna.

¿Cómo puedo recoger pruebas de la humedad?

Para poder realizar la reclamación tendrás que recoger pruebas. Para recoger pruebas legales que te sean válidas en un juicio deberás ponerte en contacto con el perito de ViaPericial. El mismo hará una intervención para recoger las pruebas legales que posteriormente podrás usar para cualquier tipo de reclamación.

El perito tiene un trabajo claro, realizar una inspección relacionada con la humedad. Con ese trabajo no solo se recogen pruebas, sino que también se sabrá cuál es el origen del daño y la cuantía económica de la reparación. Gracias a esa información te será más fácil saber a quién tendrás que realizar la reclamación.

Proceso para la reclamación de daños y perjuicios por humedades

Lo primero que tienes que hacer es identificar la humedad y una vez que la tengas identificada deberás seguir los siguientes pasos.

1- Documentación

Para poder realizar una reclamación completa lo que tendrás que hacer es recopilar toda la información. Te mostramos los documentos mínimos que tendrás que tener en tu poder para poder ponerla en práctica.

  • Contratos y acuerdos relacionados con la propiedad.
  • Correspondencia con la parte responsable.
  • Facturas de reparación.
  • Fotografías que muestren los daños.
  • Informes de inspección de humedades.
  • Cualquier otro documento relevante.

2- Pasos a seguir

Para que la ejecución de la reclamación pueda tener éxito es importante seguir una serie de pasos que te vamos a mostrar. Pero antes, queremos dejar claro que en la gran mayoría de ocasiones la notificación siempre debe realizarse por escrito. Y en esa notificación se debe dejar constancia de que tenemos intención de realizar la reclamación. Dicho esto, podemos seguir los siguientes pasos.

  • Negociación: se suele conocer bajo el nombre de negociación directa. El objetivo de esta acción es intentar llegar a un acuerdo entre las partes afectadas. De esta manera se evita tener que ir a los tribunales. Eso sí, aunque no se acuda a los tribunales, lo mejor es contar con la ayuda de la representación de un abogado. Así podrá negociar en tu nombre y podrás tener la certeza de conseguir un buen resultado.
  • Meditación: la mediación puede ser una gran opción para el juicio. El objetivo del mediador es conseguir que las dos partes puedan llegar a un acuerdo. Es un proceso más rápido y por supuesto más barato que el juicio.
  • Juicio: si los dos métodos tradicionales no dan el resultado esperado, entonces el último paso es realizar la reclamación vía judicial. De nuevo, el abogado te ayudará a seguir los pasos adecuados para que el proceso sea un éxito.

Finalmente tenemos que destacar que siempre hay que tener en cuenta los plazos a la hora de realizar la reclamación de daños y perjuicios. Si no tienes claro qué plazos tienes disponibles, lo mejor es consultar con un abogado. Así podrás asegurarte de que la reclamación la vas a presentar a tiempo, sobre todo si la vas a realizar a la constructora o vendedor de la vivienda.